Llevo un mes sin postear, he tenido muchos problemas con el ordenador ultimamente. Y hace casi 100 días que hable por última vez de mi primer viaje a Japón, y es el tema principal del blog, asi que hoy hablaré de Shinjuku.
Fuimos a Shinjuku por primera vez después de ver Shibuya. Cuando llegamos me sorprendí del enorme tamaño de su estación, tiene hasta puestos de comida antes de pasar por las taquillas (foto de arriba). He de decir que estos puestos y esta salida que usamos la primera vez no la he vuelto a ver nunca, no tengo ni idea de por donde salimos ese día. Eso es debido a que esta estación tiene alrededor de 60 salidas. Esto es lo primero que vimos al salir.
No sabía muy bien por que zona del inmenso Shinjuku salimos, pero use mi orientación y nos encaminamos al centro de Shinjuku, al Studio Alta, un famoso punto de encuentro en Tokyo. En el camino vimos cientos de luces de neón ya encendidas, ya que estaba anocheciendo. Había anuncios de karaokes, recreativas, tiendas y centros comerciales por todas partes. Miles de sitios para elegir donde pasar el rato. Nosotros casi inconscientemente nos metimos en la primera recreativa que encontramos.
Conseguimos resistirnos a las máquinas de gancho de la planta baja después de hacer alguna fotillo a las decenas de recreativas enfiladas de los pisos superiores y continuamos hacia Studio Alta. Caminamos unos 5 minutos más por una calle pararelela a la estación y al fin vimos una gran plaza, con neones aún más llamativos que los anteriores y una pantalla gigante reproduciendo videoclips, la de Studio Alta en el centro de este barrio. A los que les gusta el anime puede sonarles esta gran pantalla, ya que sale en Death Note.
Como ya era de noche y estabamos muy cansados por el día tan ajetreado que llevabamos, estuvimos poco tiempo más en Shinjuku. Además nos sentíamos obligados a ver de nuevo Akihabara. Andamos un rato por las calles cercanas al Studio Alta, estaban abarrotadas de gente. Algunas de las tiendas que vimos eran muy curiosas, pero vimos una frutería que se llevó la palma. Es verdad que la fruta en Japón es carísima. En esta foto se puede ver que se venden naranjas a 500 Yenes (3'5 € en aquel momento) cada una. También tenían sandías cuadradas, pero no me di cuenta de hacerles foto y no tuve oportunidad de hacerla otro día. La pequeña de éstas costaba 10000 Yenes, y la grande 20000 Yenes.
Cuando hicimos este viaje 1€ valía 140 Yenes, ahora vale unos 160 Yenes.
Fuimos a Shinjuku por primera vez después de ver Shibuya. Cuando llegamos me sorprendí del enorme tamaño de su estación, tiene hasta puestos de comida antes de pasar por las taquillas (foto de arriba). He de decir que estos puestos y esta salida que usamos la primera vez no la he vuelto a ver nunca, no tengo ni idea de por donde salimos ese día. Eso es debido a que esta estación tiene alrededor de 60 salidas. Esto es lo primero que vimos al salir.
No sabía muy bien por que zona del inmenso Shinjuku salimos, pero use mi orientación y nos encaminamos al centro de Shinjuku, al Studio Alta, un famoso punto de encuentro en Tokyo. En el camino vimos cientos de luces de neón ya encendidas, ya que estaba anocheciendo. Había anuncios de karaokes, recreativas, tiendas y centros comerciales por todas partes. Miles de sitios para elegir donde pasar el rato. Nosotros casi inconscientemente nos metimos en la primera recreativa que encontramos.
Conseguimos resistirnos a las máquinas de gancho de la planta baja después de hacer alguna fotillo a las decenas de recreativas enfiladas de los pisos superiores y continuamos hacia Studio Alta. Caminamos unos 5 minutos más por una calle pararelela a la estación y al fin vimos una gran plaza, con neones aún más llamativos que los anteriores y una pantalla gigante reproduciendo videoclips, la de Studio Alta en el centro de este barrio. A los que les gusta el anime puede sonarles esta gran pantalla, ya que sale en Death Note.
Como ya era de noche y estabamos muy cansados por el día tan ajetreado que llevabamos, estuvimos poco tiempo más en Shinjuku. Además nos sentíamos obligados a ver de nuevo Akihabara. Andamos un rato por las calles cercanas al Studio Alta, estaban abarrotadas de gente. Algunas de las tiendas que vimos eran muy curiosas, pero vimos una frutería que se llevó la palma. Es verdad que la fruta en Japón es carísima. En esta foto se puede ver que se venden naranjas a 500 Yenes (3'5 € en aquel momento) cada una. También tenían sandías cuadradas, pero no me di cuenta de hacerles foto y no tuve oportunidad de hacerla otro día. La pequeña de éstas costaba 10000 Yenes, y la grande 20000 Yenes.
Cuando hicimos este viaje 1€ valía 140 Yenes, ahora vale unos 160 Yenes.
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